Hoy ...

Hoy …

Hay pequeños y grandes momentos en la vida de todo ser que nos hacen extremadamente felices, un aniversario, un cumpleaños o cualquier logro no hace dar las mayores de las gracias por estar presentes.

Celebrar la vida y darnos cuenta que la muerte no nos roba los seres amados. Al contrario, nos los guarda y nos los inmortaliza en el recuerdo para en algún futuro los volvamos a encontrar.

El día de hoy es un día grato, no por lo que marca el almanaque, si no por lo que muchas veces olvidamos o dejamos de pasar. El celebrar cada momento la dicha de estar rodeada por la gente que te quiere y que estaría dispuesta a hacer cualquier cosa por verte feliz es uno de los mayores regalos.

Hoy hay que dar gracias a la vida porque sin lugar a dudas en el siguiente año vas a llegar distinta, exactamente más linda, más fuerte, más dócil, más cauta o tan solo que vas a llegar distinta con nuevas metas con nuevos sueños.

Deseo que recibas regalos especiales. Felicidad, en lo profundo de tu ser, serenidad con cada amanecer, el amor que sea eterno, recuerdos entrañables de momentos del ayer, un presente esplendoroso repleto de bendiciones. Y reconocimientos, de todas las cosas maravillosas 
que hay en ti. 

Yo, yo solo puedo asegurarte que de vez en cuando sin previo aviso me visita tu recuerdo, A veces viene de paso, con un recuerdo fugaz de tu sonrisa o de la mirada de tus ojos cafés, un solo instante de ti y aunque la distancia se puede medir con kilómetros se y sabes que siempre estaré ahí, porque esa fue mi promesa.

Después de todo, solo queda decir feliz cumpleaños, que Dios te bendiga y que a mí no me olvide.